24 de julio de 2025. Después de más de veinte meses de genocidio, la situación en Gaza y en cada Palestina empeora todos los días sin ninguna visión de cambio en el horizonte.
Con cada nueva persona muerta en estos territorios, un poco de dignidad y vergüenza humana que deberíamos tener. No es una guerra, es una masacre, un genocidio cometido por uno de los mejores ejércitos armados del mundo contra una población desarmada e indefensa que no solo matan armas sino hambre, indiferencia y pasividad internacional.
Las palabras no son suficientes, como este y otros cientos que se dicen y se publican en todo el planeta, sino como los asesinos de David Star y sus aliados y, la comunidad internacional más seria que no puede reaccionar como debería.
No es suficiente cancelar el comercio de armas (que todavía se implementa a pesar del arrepentimiento), todas las relaciones comerciales, sociales, políticas, deportivas y humanas con el país invasor y asesino deben ser interrumpidos, independientemente de las ideologías y las religiones. Dado que lo que sucede es un crimen contra la humanidad, es una pena para toda la tierra del planeta y las criaturas vivientes que viven en ella.
No podemos continuar como si nada hubiera pasado porque esto permanecerá en los anales de la humanidad como la mayor tragedia y la peor indolencia. Un piso tan pesado como el número de personas fallecidas y un tormento tan grande como el peso de la historia.
Otra iniciativa, pero no menos, es lo que ha acordado la Asociación del Comité Español para la UNRWA (Oficina de la ONU para los refugiados de Palestina), el Fondo de Niños de la ONU (UNICEF) y las organizaciones no estatales salvan a los niños, médicos sin fronteras, movimiento por paz y Osfam Intermón.
Todos han elevado sus votos suscribiendo un manifiesto de que «no es una base. Es un grito. Es un puño en la tabla de indiferencia. Es un llamado urgente a la conciencia del mundo», y que todas las naciones deben replicar.
Puedes unirte firmando aquí (Si tiene identificación en español) o sigue la campaña en las redes.Pazlestina