Andrés Llinás, el defensor central de Millonarios, se pronunció recientemente sobre el incidente que involucró a Álvaro Montero en el palográfico, en el contexto de la jornada número 18 de la liga Betplay. Este acontecimiento ha captado la atención de los medios y los aficionados, destacando la tensión que se vive en el fútbol profesional colombiano.
Al finalizar el partido, se desató una situación problemática cuando el portero Tenía un problema con un policía, quien lo empujó mientras Montero se encontraba cerca del túnel que conduce a los vestuarios. Esta interacción no solo refleja la intensidad del juego, sino también el complicado ambiente que muchas veces se vive en los estadios.
Añadiendo a la escena, el portero estaba siendo objeto de insultos y objetos lanzados desde la Tribune Occidental, lo que hizo que la atmósfera se volviera aún más tensa. Estas acciones de la afición eran una respuesta a ciertas actitudes del arquero durante el encuentro, lo que resultó en una situación incómoda para todos los involucrados.
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Durante el partido, Montero a veces Hizo algunos gestos para los fanáticos de Once Caldas, una acción que sin duda provocó reacciones tanto en el campo como entre los seguidores. Además, en varias ocasiones, el portero tomó su tiempo para reanudar el juego, lo que pudo haber exacerbado aún más la indignación de la hinchada local.
Cuando parecía que todo se había normalizado en el campo de juego, la situación escaló rápidamente. La policía se vio involucrada y la situación se complicó, lo que llevó a que Millonarios tuviera que organizar una conferencia de prensa tras el partido contra Once Caldas. Este tipo de acciones no son comunes cuando un equipo juega como visitante, lo que añade un climatológico contexto a lo sucedido.
Los jugadores de Millonarios no pudieron abandonar el vestuario de inmediato, ya que algunos aficionados del ‘blanco blanco’ intentaron continuar la confrontación con Álvaro. “La gente estaba un poco alterada, no dejaron que el vestuario.”, comentó Llinás en una zona mixta, señalando que este tipo de situaciones, aunque lamentables, son parte del mundo del fútbol.
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Por otro lado, David González, durante una conferencia de prensa, aclaró que no era cierto que Montero había agredido a la policía. González defendió al portero, afirmando que él únicamente intervino porque estaban tratando a Montero «como un criminal», una frase que resalta la tensión y el malentendido que pudieron haber surgido en esa situación caótica.
Así fue como Llinás abordó la problemática que enfrentó Montero en Manizales, enfatizando que afortunadamente la situación no escaló más allá de lo ocurrido en el estadio, lo que podría haber tenido consecuencias más graves para todos los involucrados.
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