La semana finalizó con noticias muy esperadas y necesarias para la estabilidad de la industria de las telecomunicaciones: La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) decidió aprobar la integración total entre Millicom Tigo y Movistar.
Hay que destacar el trabajo del Superintendente Cielo Rusinquequien con su equipo de trabajo logró entender claramente la situación del mercado y las consideraciones técnicas y comerciales a tener en cuenta, para hacer posible una fusión de esta magnitud sin afectar el mercado, en beneficio del usuario y, sobre todo, al no dejarse presionar por solicitudes que hubieran apretado y distorsionado el mercado.
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Muy bien, Superintendente Cielo: su decisión permite una fusión urgente que responde a una tendencia global en telecomunicaciones y al mismo tiempo protege a los pequeños operadores como WOM y los operadores virtuales.
Esta es una industria donde Las inversiones constantes y un fuerte flujo financiero son la base del éxito.
Quienes no invierten o no tienen dinero para invertir no tienen forma de sobrevivir en un negocio altamente competitivo que requiere cientos de millones de dólares al año para expandir y mantener redes e innovar en un servicio como las telecomunicaciones que es fundamental para el desarrollo socioeconómico y cultural de un país.
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Estas empresas son el sistema circulatorio de una economía a través del cual fluyen los negocios, la educación, el conocimiento, las transacciones, la innovación y la democracia. Según el Dane, este sector aportó el 3,2% del PIB nacional, con inversiones que alcanzarán los $9 mil millones en 2024. Por supuesto, Tigo y Telefónica han invertido gran parte de este capital en el país.
En la mayoría de países ocurrió lo mismo hace algún tiempo: el mercado se redujo a dos o como máximo tres operadores, con fusiones, debido a la avaricia financiera del modelo de negocio.
Movistar y Tigo, imagen de referencia Foto:Archivos El Tiempo/TIGO
Colombia no debería, como la SIC, no creer en la historia del “duopolio”. El usuario no se ve afectado. Según la OCDE, Colombia es el país con las tarifas de telecomunicaciones más bajas de su lista. Es más: Pronostico una de las mayores batallas comerciales y competitivas entre Claro, el nuevo Tigo+Movistar, Wom y otros operadores. de tarifas, clientes, servicios e innovaciones que aportan aún más beneficios a los clientes.
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Queda esperar que el regulador, la Comisión Reguladora de Comunicaciones, un organismo de tradición técnica y seria, consolide lo que falta en la decisión de la SIC en la misma dirección y reafirme que en Colombia, como en todo el mundo, los operadores están obligados a invertir, cumplir con sus obligaciones y pagar por el espectro que quieren comprar. Queremos operadores que realmente demuestren su compromiso con Colombia y los colombianos. Invertir.
JOSÉ CARLOS GARCÍA R.
Editor multimedia
@JoséCarlosTecno
